Ermitas
ERMITA DE SAN JUAN LORENZO
Según la tradición, la ermita se levanta sobre el solar que ocupó la casa donde nació san Juan Lorenzo hacia la mitad del siglo XIV, siendo según cita el padre Laín hijo de pobres labriegos. La referencia a este hecho aparece también reflejada en los dichos de los danzantes:
… “Juan, el padre que vivía
donde hoy su ermita se posa,
bendijo a Dios y a la esposa
que tal joya le traía”…
El edificio es modesto, de tapial y remates de ladrillo construido en el segundo tercio del siglo XVIII, barroco con planta de cruz latina, muy reformado en los años 60 y que alberga en la actualidad tres retablos: El principal, dedicado a San Juan Lorenzo y rematado por una imagen de la Virgen de Atocha y el de la Piedad y el de san Blas a ambos extremos del crucero. En este último se ha instalado recientemente la imagen de la Virgen Niña: devoción traída de México por los Padres Misioneros de la Natividad de la Virgen.
ERMITA DE LA VIRGEN DE ATOCHA
Cuenta una antiquísima tradición, que pasando por Cetina unos arrieros originarios de Madrid, una barrancada amenazó con ahogarlos a ellos y a sus caballerías… Los arrieros se encomendaron a su patrona la Virgen de Atocha y en aquel momento las aguas los sacaron sanos y salvos del barranco salvando así sus vidas, las de sus caballerías y toda su mercancía.
Durante dieciocho años la ermita estuvo en ruinas y completo deshaucio hasta que fue restaurada y reabierta al culto en 2006. Conserva interesantes yeserías mudéjares muy tardías pero otras muy interesantes se perdieron para siempre durante los años de ruina y la restauración.
ERMITA DE SANTA QUITERIA
La ermita de Santa Quiteria es una de las ermitas que, a modo de cinturón salpicaban el término de Cetina en siglos pasados (San Julián, San Andrés, Santa Catalina…).
A pesar de que la devoción a Santa Quiteria en Cetina se remonta a finales de la edad Moderna, su ermita es un edificio modesto, con pórtico a los pies y de escaso valor histórico-artístico, que alberga en su interior un reutilizado retablo neogótico de la década de 1950.
A los pies de la ermita se encuentra un manantial de caudal abundante y de agua de muy buena calidad que abastece la red pública de la localidad.
